Creación

Diez sonetos (autorretrato en otros)

Una decena de composiciones poéticas de Antonio Gracia, remisiones a otros tantos personajes de la historia de la literatura y el arte, de Quevedo a Schumann, pasando por Ilaria del Carretto.

/ por Antonio Gracia /

El desencanto (Quevedo)

Aceptar que una estrella silenciosa
es, en verdad, el fuego de un infierno,
y que en el resplandor del alba hermosa
nace la noche con su breve invierno.

Admitir que la muerte lujuriosa
se engendra ya en el cíngulo materno
y florece en el lirio y en la rosa
porque todo es fugaz y nada eterno.

Comprender que son vanos los empeños
del vivir por huir de un fin amargo
y que al hombre lo rige el desengaño.

Saber que el corazón inventa sueños
para sobrevivir: y, sin embargo,
no poderse engañar con ese engaño.

Bajo la pluma (Lope)

Solo en la inmensidad del universo,
bajo el párpado azul del alto cielo,
el corazón tan solo halla consuelo
en el cuadro, la música y el verso.

Por sosegarme, con la luz converso
del músico paisaje, del desvelo
del viento al salmodiarse, del anhelo
de infinitud, y en versos me disperso.

En las constelaciones prodigiosas
de la frágil palabra me persigo
sin esperanza, pero incontinente.

Las luciérnagas arden como rosas
alumbrando senderos, y las sigo
armado con la pluma solamente.

Liturgia del poema (Góngora)

Primero es un rumor a un ritmo asido,
un aroma, una luz aprisionada
en la sombra, una hoguera dilatada
que asoma su fulgor desconocido.

Luego encuentra su música el sonido
en la frágil palabra revelada;
y la voz, caudalosa o mesurada,
la pluma ordena, pule y da sentido.

En la página hermosa y fatigada
la mano alza la luz desde la bruma,
porfiando darle vida a cuanto nombra.

Quedan, bajo la herrumbre calcinada,
palabras sostenidas por la pluma
y sueños derribados en la sombra.

Yacente sobre el fuego (Ilaria del Carretto)

Está sobre la tumba el cuerpo echado,
pero mantiene la cabeza erguida;
y su efigie de piedra, ennoblecida
por el cincel, el tiempo ha derrotado.

La mirada yacente y sostenida
parece, en su quietud, haber hallado
la senda de la muerte hacia la vida
y, en el sosiego, el paraíso ansiado.

La mano mortecina y delicada
abraza el aire y su otoñal perfume,
mientras fulge la luz su incandescencia.

En su desolación esperanzada,
la escultura de pórfido resume
la frágil potestad de la existencia.

Böcklin (La isla de los muertos)

Como un enigma en el ocaso erguido,
yace el islote, leviatán varado:
si por el cuarzo, sueño iluminado,
por los cipreses, túmulo florido.

Umbral de luz en piélago dormido,
torre frugal, barquero amortajado,
aire en quietud y remo desnortado
en el espacio el tiempo han detenido.

El fantasmal y onírico paisaje
—clara desolación, febril sosiego—
muestra a Caronte al conducir su presa.

¿Pero hacia dónde se encamina el viaje?
A la esperanza y sinrazón me entrego:
la Muerte hacia la vida nos regresa.

Razón de la palabra (Fray Luis)

Sueño que un día alcanzaré la cumbre
de la serenidad y la firmeza.
Pero el oro del tiempo es solo herrumbre,
ruina de sueños, vida sin nobleza.

Nunca escribí para buscar belleza,
sino para aliviar la pesadumbre;
pues, al verbalizarse, mi tristeza
halla consuelo, encuentra mansedumbre.

Sé bien que la existencia es una herida
que sólo con la muerte se sutura,
y cada cual se entrega a una esperanza.

Yo leo el manuscrito de la vida,
trato de descifrarlo en mi escritura
y aprendo a ver la muerte con templanza.

Non serviam (Garcilaso)

Cansado de morirme cada día
sin hallar el descanso de la muerte,
renuncio a refugiarme en la elegía
como consuelo ante la adversa suerte.

Rompo la tradición de la poesía
de quien en versos su dolor convierte,
y me esfuerzo en hacer de la alegría,
de entre todas las musas, la más fuerte.

En vez de recrear con amargura
la aventura fatal de la existencia,
quiero hacer de mi pluma mi destino.

Tal vez plantando paz en la escritura
la existencia, por fin, tome conciencia
de que solo la luz es un camino

Meditación (Yepes)

A veces, cuando sueña la conciencia
en el umbral del enardecimiento,
siente en su beatitud y acendramiento
la transfiguración de su existencia.

El alma se despoja de su esencia
y, como si surcase el firmamento,
llega a la fuente del conocimiento
y allí se inviste de clarividencia.

Regresa luego de la estancia hermosa
ataviada de luz y de armonía,
y despierta callada y fervorosa.

Desde ese instante el corazón rebosa
sed de inmortalidad, y sólo ansía
una metamorfosis venturosa.

Opus postumum (Schumann)

En los atardeceres, cuando el alma
se suaviza, y se va alejando el día,
siento que en mi dolor deja su calma
el resplandor de la melancolía.

Me invade una quietud avariciosa
de desasirme y de transfigurarme
en el pétalo hermoso de una rosa
para, luego, en estrella reencarnarme.

Hoy esa dulcedumbre me atenaza
con sus amables brazos y sus besos,
y se estremece el universo en mí.

Siento una luz oscura que me abraza.
Va trepando la muerte por mis huesos.
Se ilumina la nada. Sé que fui.

POSDATA
Sonetazo de 154 sílabas (J. Cantero)

Poetas que escribís versos de viento,
ruiseñores de la versolatría
que juglariáis la gran algarabía
aprendida en la hiel del excremento:

¿Qué músicas seguís en el intento
de almibarar vuestra disentería,
si escribís versos, pero no poesía,
con sílabas sin pies, alma ni aliento?

Prosisómanos son vuestros poemas,
estangurrios, caníbales y tísicos,
como nacidos de parlante afasia.

Famamundiarse a base de lexemas
estupradores, chancros, sifilíticos:
tal es, poetas, vuestra idiosincrasia.

[EN PORTADA: Reproducción del rostro de la estatua funeraria de Ilaria del Carretto, de Jacopo della Quercia, por el taller Studio 17]


Antonio Gracia es autor de La estatura del ansia (1975), Palimpsesto (1980), Los ojos de la metáfora (1987), Hacia la luz (1998), Libro de los anhelos (1999), Reconstrucción de un diario (2001), La epopeya interior (2002), El himno en la elegía (2002), Por una elevada senda (2004), Devastaciones, sueños (2005), La urdimbre luminosa (2007). Su obra está recogida selectivamente en las recopilaciones Fragmentos de identidad (Poesía 1968-1983), de 1993, y Fragmentos de inmensidad (Poesía 1998-2004), de 2009. Entre otros, ha obtenido el Premio Fernando Rielo, el José Hierro y el Premio de la Crítica de la Comunidad Valenciana. Sus últimos títulos poéticos son Hijos de HomeroLa condición mortal y Siete poemas y dos poemáticas, de 2010. En 2011 aparecieron las antologías El mausoleo y los pájaros y Devastaciones, sueños. En 2012, La muerte universal y Bajo el signo de eros. Además, el reciente Cántico erótico. Otros títulos ensayísticos son Pascual Pla y Beltrán: vida y obraEnsayos literariosApuntes sobre el amorMiguel Hernández: del amor cortés a la mística del erotismo La construcción del poema. Mantiene el blog Mientras mi vida fluye hacia la muerte y dispone de un portal en Cervantes Virtual.

Acerca de El Cuaderno

Desde El Cuaderno se atiende al más amplio abanico de propuestas culturales (literatura, géneros de no ficción, artes plásticas, fotografía, música, cine, teatro, cómic), combinado la cobertura del ámbito asturiano con la del universal, tanto hispánico como de otras culturas: un planteamiento ecléctico atento a la calidad y por encima de las tendencias estéticas.

5 comments on “Diez sonetos (autorretrato en otros)

  1. Soberbios sonetos de Antonio Gracia en los que la sosegada melodía de las palabras y los pensamientos, encerrados ambos en la cárcel de oro del soneto, irradian una luz intensa que atraviesa las paredes de la rigidez formal del ritmo y la rima para llegarse hasta la perfecta conjunción de emoción estética y ética, que constituye la esencia lírica del poema

    El cultivo del soneto es difícil, y no sé si esa será una de las razones de la escasez de poetas que ahora lo practican

    Sin embargo, no olvidemos que uno de los libros fundamentales de la última gran generación de poetas castellanos, es decir los del 27, fue el Rayo que no cesa, libro que no desmerece de lo mejor de la poesía española de todos los tiempos, y que está formado por sonetos exclusivamente

    Borges, que era ante todo poeta, también lo practicó con una altura semejante a Quevedo, Cervantes Lope o Fray Luis de León

    Pero el verso libre, debido a su aparente sencillez, ha ganado adeptos con la misma facilidad con la que parece conceder sus favores

    Craso error, en el que cae la inmensa mayoría de los poetas contemporáneos, que piensan que basta con cortar un renglón por la mitad más o menos para escribir poesía en verso

    La poesía lírica tiene un origen musical que, en lenguas como el provenzal, inglés o italiano, de una sonoridad ejemplar, provocó el verso y la palabra expresiva en su modulación melódica y rítmica

    Está sensibilidad, sostenida durante siglos, dejó paso a un intelectualismo pedante y a un lloriqueo sentimental

    Intimismo victimario en donde el poeta aparece como destinatario de desgracias y dolores, olvidando que casi todo hombre lo es, aunque lo grave es el abandono de la sonoridad en beneficio del significado

    Error de cálculo al que se suma ciegamente cualquiera que siente que su llanto es bello por el hecho de ser llanto

    Valéry escribió que si la prosa es artificio puro la poesía es artificio purísimo

    Lo paradójico del poema, como en el caso de esos sonetos de Gracia, es que debajo de la impecable técnica pueda surgir la emoción sin mezcla de autocompasión pueril ni inútil reivindicación de una felicidad que a nadie le es prometida al nacer

    Antonio Gracia se toma tan en serio los sonetos que en el último de ellos satiriza a aquellos autores que no se los toman

    José Manuel Ferrández

  2. antonio gracia

    Gracias y saludos.

  3. Blanca Andreu Fernández-Albalat

    Antonio, me parecen preciosos. Espléndidos. Son sonetos de envergadura, en mi opinión. Se leen con muchísimo placer. Son bellos, fluidos, armoniosos, profundos en muchos casos, airosos, elegantes.

    Merecerían publicarse en un soporte que no fuera virtual. Parecen clásicos, en el mejor sentido del término. Puedes estar muy orgulloso.

    Me gusta, por otra parte, que atices sonetazos, práctica que compartimos. Ya te enviaré alguno. Por mi parte, también los llamo así desde hace años. Al principio, quería especializarme en sonetazos a García Montero, que es un señor que me pone nerviosa porque opino que le cuadra perfectamente ser recipendario de tu sonetazo de hoy. Sin embargo, sólo le endilgué dos. Hay tanto muso por doquier…

  4. antonio gracia

    Querida Blanca: me alegra «verte» por aquí, ya que hace tanto que no nos vemos.
    Sobre el supuesto recipendario: ten en cuenta que la mejor alabanza publicitaria es el silencio.
    Qué tiempos aquellos en los que la existencia iba a ser como la soñábamos. Pero todo lo arrasa el tiempo con su furia.
    Habrá en algún lugar más claridad.

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