El secreto del lago

/ una reseña de Miguel de la Guardia /

El secreto del lago está siendo un éxito muy leído en Valencia, donde lleva vendidos más de setecientos ejemplares. Mari Carmen Prieto ha situado su primer libro en Kenia y lo ha estructurado en dos bloques totalmente distintos. Esa estructura en dos tiempos es un hallazgo literario que, en definitiva, logra colocar la ficción dentro de un ambiente que se sabe real, por lo que tiene de confesión personal, y deja a quien lo lee con la duda de si todo lo narrado responde a las vivencias de la autora o a su imaginación.

La primera parte es claramente un relato biográfico en forma de diario de viaje que transmite al lector el goce de viajar en familia, con una declaración explícita de amor por el país africano y de respeto por sus gentes y tradiciones. En cualquier caso, no es un texto aislado y su mayor virtud es que sirve de introducción a los lugares y personajes en los que transcurre la verdadera historia de misterio, con la investigación, por parte de la protagonista, de una serie de muertes acontecidas en el lago Naivasha. Mezcla de realidad y creación literaria, de lugares y personajes reconocibles y de otros protagonistas inventados, la narración mantiene el interés del lector y le atrae al África negra, sus paisajes y la fauna salvaje, además de plantear una serie de valores y principios morales de validez general.

Narración escrita en primera persona y con evidentes coincidencias de nombres y lugares, su autora asume el riesgo de que los lectores confundan ficción y realidad; lo que tratándose de una persona conocida en la sociedad valenciana añade un cierto morbo. Probablemente esta sea una de las razones del éxito de la novela, aunque suponga una exposición excesiva de la autora que, aun así, sale airosa del apuro con una mezcla de sinceridad y desparpajo en un relato original y fresco.

Se trata de una primera novela, con los defectos naturales de los primeros pasos literarios, pero el libro es un ensayo valiente y sincero que, de seguir en el empeño su autora, augura que sus próximas novelas aporten frescura al panorama de la narrativa valenciana.

Editado con elegancia y una cuidada maquetación, el libro está escrito en un estilo directo y se organiza en cuarenta y ocho capítulos de corta extensión; lo que facilita su lectura y permite disfrutar de cada momento de una historia que transcurre en un ambiente de exotismo y de lujo.

Dejen que les desvele un pequeño secreto que esconde la portada, puesto que si una de las protagonistas del relato es una leona, a quien se inmortaliza aquí es a Tarón, el león de la autora, que nacido en el antiguo pub de la ciudad Johann Sebastian Bach, vivió veinte años en nuestras tierras y compartió doce con su familia. Además, la edición se ha tomado la licencia de trasladar a la cara del león el color de los ojos de la escritora. Ya ven: toda una declaración de intenciones desde antes de que se abra el libro.

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Miguel de la Guardia es catedrático de Química Analítica de la Universitat de València desde 1991. Tiene un índice H de 88 según Google Scholar y ha publicado más de 900 trabajos en revistas del Science Citation Index con más de 34.600 citas,5 patentes españolas, 4 libros sobre Green Analytical Chemistry (Elsevier, RSC y Wiley), un libro sobre Calidad del Aire (Elsevier), 2 libros sobre Análisis de Alimentos (Elsevier and Wiley) y un libro en dos volúmenes sobre Smart materials en Química Analítica (Wiley). En la actualidad está preparando un libro sobre Nuevas sustancias sicoactivas con un contrato con Elsevier. Además ha publicado 12 capítulos de libros. Ha dirigido 35 tesis doctorales y es Editor jefe de Microchemical Journal (Elsevier), miembro del consejo editorial de varias revistas y fue condecorado como Chevallier dans l’Ordre des Palmes Académiques por el Consejo de Ministros de Francia y Premio de la RSEQ (España). Entre 2008 y 2018 publicó más de 300 columnas de opinión en el diario Levante EMV y colabora con El Cuaderno desde mayo de 2021.