/ Escuchar y no callar / Miguel de la Guardia /
Antonio Ferri es un joven artista a sus ochenta y cinco años, que sigue trabajando cada día con el mismo tesón y la misma ilusión que pusiera en sus primeros trabajos. Prueba de ello es que sigue pintando cada día y depurando su estilo, tanto en la preparación de las tramas que sustentan su obra reciente como en la elaboración, figurativa o abstracta, del resultado final. Como ven, el artista se aleja de la opinión general que considera el museo como un mausoleo de obras del pasado, y aunque es cierto que la financiación del Museo Antonio Ferri por la Unión Europea supone un espaldarazo a su brillante trayectoria, nada más lejos de ser un capítulo cerrado en la historia del arte valenciano.
El 15 de marzo de 2007 se inauguró en Bocairent el museo del que les hablo y el pintor hizo una generosísima donación de obras de los diferentes períodos de su actividad. Las salas en las que se expone la obra de Ferri rebosan de ideas y de registros distintos que, todos ellos, pertenecen al pintor, y por eso recomiendo que si se acercan a esta bella localidad, que tiene atracciones turísticas como las llamadas cuevas de los moros, las cavas o neveros, las ruinas medievales, las fuentes, los puentes y acueducto, las ermitas o la iglesia parroquial, no dejen de descubrir el museo. Nada mejor para una visita turística de Bocairent que desembarcar en el casco antiguo y pasear las calles, sin olvidar la visita al museo, que debe ser concertada previamente para evitar la sorpresa de un horario limitado a los sábados de 16 a 18 y los domingos de 10 a 11:45.
Tal y como dije hace unas semanas en relación con el museo de Antonia Mir en Catarroja, no entiendo la política cultural de estas ciudades pequeñas que tienen la inmensa suerte de contar con un fondo muy amplio de la obra de artistas vivos, pues lo suyo sería favorecer el contacto de los autores con su público, potenciar la difusión de su obra mediante la edición de serigrafías de sus obras y, en el caso de Antonio Ferri, que continúa pintando cada día, hacer accesible la adquisición de su obra al visitante. Si en relación con el museo de Mir propuse la creación de materiales escolares que sirvieran de apoyo a las visitas estudiantiles y de una asociación de amigos del museo para favorecer visitas recurrentes, así como la difusión de la obra de la artista, en este caso, en el que la salud y actividad de Antonio Ferri lo permiten, creo que sería imprescindible dotar al museo de una tienda en la que adquirir obras del artista para reforzar el impacto del museo sobre su área de influencia y contribuir al mantenimiento del autor y su actividad antes de que las cenizas del mismo reposen bajo el olivo que se ve en su jardín desde las ventanas de las salas.
Como apreciará el lector, las iniciativas que propongo tratan de poner en valor la figura de los autores y favorecer la difusión de su obra con la creación de actividades que permitan obtener retornos económicos además del valor intrínseco de difundir el arte y la cultura. Lo otro, mantener el museo como una caja cerrada con un hermoso contenido que solo se deja ver unas pocas horas a la semana, no crea una necesidad de contacto con los autores y sus obras por parte de la ciudad que alberga el museo ni por los visitantes y sería desperdiciar el tiempo y las oportunidades. Confiemos en que los responsables municipales y autonómicos acojan mis propuestas con interés y, al menos, las valoren económicamente, para estudiar su viabilidad.
Miguel de la Guardia es catedrático de química analítica en la Universitat de València desde 1991. Ha publicado más de 700 trabajos en revistas y tiene un índice H de 77 según Google Scholar y libros sobre green analytical chemistry, calidad del aire, análisis de alimentos y smart materials. Ha dirigido 35 tesis doctorales y es editor jefe de Microchemical Journal, miembro del consejo editorial de varias revistas y fue condecorado como Chevallier dans l’Ordre des Palmes Académiques por el Consejo de Ministros de Francia y es Premio de la RSC (España). Entre 2008 y 2018 publicó más de 300 columnas de opinión en el diario Levante EMV.
Enhorabuena por el planteamiento que realizas respecto a la difusión de la obra de los artistas.
Gracias, Arturo. Espero que alguien tome nota y se anime a reavivar los museos!!!
A ti, mil gracias por leer mi columna y mi recomendación de que visites el museo, pues valen la pena el artista y sus obras
Miguel, has dado dos demostraciones en las que nos has acercado a dos artistas de los que no teníamos noticia. Creo que debemos atender a algo fundamental: la conselleria de Educación y cultura tiene que ser ayudada por los ciudadanos para dar a conocer el trabajo de verdaderos artistas que, si fueran bien atendidos, podían llenar espacios importantes en las vidas de muchas personas que consumen tardes y mañanas ante programas basura. Esos artistas son los que hacen comunidad y proyectarlos hacia su comunidad, como bien dices, sería algo muy sano para ellos y para su comunidad que, por supuesto, no tiene los límites de su pueblo. ¿Cómo no solidarizarse con lo que propones? Guillermo
Mil gracias, Guillermo
Eso es lo que tratamos de hacer con propuestas en positivo para mejorar la gestión de la educación, la cultura y otros ámbitos. Eso también es ejercer la democracia. No solo votar