La luz que nace del dolor
Álvaro Valverde reseña ‘Los nombres de la nieve’, de Dionisio López, poemario conmovedor y verdadero, luminoso al cabo, sobre la muerte de un hijo.
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Álvaro Valverde reseña ‘Los nombres de la nieve’, de Dionisio López, poemario conmovedor y verdadero, luminoso al cabo, sobre la muerte de un hijo.
Ada Soriano entrevista al poeta vigués, autor de ‘Poemas ausentes’, libro «honesto y sincero» y «de cadencia petrarquista» en palabras de Joan Margarit.
Javier Pérez Escohotado disecciona un libro de entrevistas en el que detecta numerosos y muy groseros plagios.
Álvaro Valverde reseña una antología de poemas del vate ruso: un «solitario contemplativo», poeta «de la mirada» de descripciones naturales precisas, con una minuciosidad «que no cansa porque está hecha de detalles significativos que buscan siempre trasladar al lector un estado del alma. Del alma rusa, acaso».
Álvaro Valverde reseña ‘Con los ojos de nadie’, de José Saborit, un poemario singular y hermoso, marcado por una impronta meditativa y el rastro pictórico de un poeta que es además pintor.
Ada Soriano entrevista a la autora de ‘Yo escribo la noche’, poeta cómplice de la oscuridad y de la luz, del amor y sus heridas, con la solvencia propia de quien escribe sin adornos vacuos, sin concesiones.
El poeta de Oliva publica en Pre-Textos la primera antología de su obra después de recibir el Premio Cervantes de 2020, en la que incluye siete poemas inéditos y donde la finca familiar acoge el latido y la metáfora de una de las escrituras esenciales de las letras hispánicas.
Ada Soriano entrevista al poeta valenciano, autor del poemario ‘Llegar a casa’, cuyos versos rezuman paz desde una poética sobria y a la vez sensorial, profunda y contemplativa.
José Luis Gómez Toré traza una semblanza del flamante Premio Cervantes, de quien escribe que toda su lírica «parece partir de ese lugar fantasmal de la memoria, de ese tiempo que no existió y al que, sin embargo, se vuelve una y otra vez».
Antonio Gracia escribe sobre Francisco Brines, flamante Premio Cervantes, un poeta —escribe— que «siente la vida como si ya hubiese pasado o, mejor, como si la hubiera ya perdido».
Poesía y vida, vida y poesía imbricados en un quehacer riguroso y constante, en el que, se lo hemos oído decir muchas veces, «en creación todo lo que no suma resta»: Pureza Canelo sigue sumando dígitos en una de las indagaciones metapoéticas más exigentes de la actual poesía en lengua española.
En esta nueva página de su diario, Avelino Fierro diserta sobre el habla argentina; «acento enfático a veces, adormecido otras», que hace a uno imaginarse «a las palabras en tropel viendo caer el crepúsculo en la quinta de un arrabal en Buenos Aires y viajando luego en ‘tramway’ hasta un café del centro y asomándose a una tertulia: unas saldrán lentas de la boca, como desperezándose, y otras a toque de cornetín, en formación de combate, preparadas —esto es lugar común, para nosotros, de los hablantes de allá— para argumentar o disputar durante horas con intensidad».
En el último poemario de Ángel Paniagua, el paso del tiempo y la conciencia de que ha llegado el momento de rendir cuentas determinan la orientación de estos poemas en los que la sensación de fracaso vital y las cicatrices que deja dicho fracaso van penetrando en la mente del lector hasta convertirse en algo agobiante.
Carlos Alcorta se adentra en la poesía del escritor roteño, que con su último poemario muestra su dicción más verdadera, la melancólica y elegíaca, que le ha convertido en una de las voces más relevantes de su generación.